Perspectivas económicas de América Latina 2017
El informe Perspectivas Económicas de América Latina analiza cuestiones relacionadas con el desarrollo económico y social de la región. Cada año, y desde el lanzamiento de la primera edición en noviembre de 2007, el informe analiza la situación y los resultados latinoamericanos, y los compara con los de otros países y regiones del mundo, compartiendo así experiencias y buenas prácticas.
Esta edición se centra en la juventud, las competencias y el emprendimiento para un crecimiento más inclusivo y sostenible en la región. Presenta un análisis detallado de la participación de los jóvenes latinoamericanos en las actividades productivas, examinando su inserción en el mercado laboral, las competencias adquiridas y sus actividades emprendedoras.
El informe se presentó en el marco de la XXV Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado y de Gobierno, en Cartagena de Indias, Colombia. En la presentación intervinieron los representantes de los organismos responsables de la redacción del informe (OCDE, CAF y CEPAL), así como la Secretaria General Iberoamericana (Rebeca Grynspan) y los presidentes de México, Perú y Colombia.
La economía de ALC, con una evolución prometedora en épocas recientes, está ahora en fase de ralentización, lo cual pone en riesgo los avances sociales, políticos y económicos de la última década. Los jóvenes se encuentran en una encrucijada y encarnan las promesas y los desafíos de la región.
Estos son algunos de los desafíos y recomendaciones que se plantean en el informe:
- La mayoría de los jóvenes al dejar la escuela acceden a empleos informales o directamente pasan a ser inactivos. Una quinta parte de los 163 millones de jóvenes que viven en América Latina trabaja en empleos informales y otra quinta parte ni trabaja ni estudia ni se está capacitando (NEET).
- La reciente expansión de la cobertura educativa debe ir acompañada de vínculos más fuertes con el mercado laboral. Pese a los notables progresos en educación durante la última década, menos de un tercio de los jóvenes latinoamericanos de entre 25 y 29 años ha recibido algo de educación en colegios universitarios, universidades o institutos técnicos de nivel superior. Muchos jóvenes latinoamericanos abandonan el sistema educativo demasiado pronto: en consecuencia, un tercio – 43 millones – no ha completado la educación secundaria y no está siendo escolarizado. Además, la educación técnica y profesional rara vez ofrece a los jóvenes competencias técnicas, profesionales y de gestión pertinentes y de alto nivel. De hecho, la región ALC exhibe la mayor brecha del mundo entre la oferta disponible de competencias y las demandadas por las empresas.
- Invertir en las competencias de los jóvenes es esencial para poner en funcionamiento fuentes endógenas de crecimiento y construir una base sólida para el progreso futuro. Mejorar las competencias de la juventud latinoamericana implica reforzar el sistema educativo y promover políticas de competencias amplias y que se desarrollen a lo largo de toda la vida.
- Los ecosistemas de emprendimiento para emprendedores de alto crecimiento se están desarrollando rápidamente, pero ofrecen empleabilidad y movilidad social solo a unos pocos. ALC tiene pocos emprendedores de alto nivel y muchos emprendedores de subsistencia. La prevalencia de trabajadores por cuenta propia entre los jóvenes (16%) es casi el triple de la prevalencia en la OCDE (6%). Solo el 13% de los jóvenes empresarios de la región posee educación terciaria, frente a un 33% en las economías de la OCDE.
- Impulsar el emprendimiento puede mejorar y facilitar la transición de los jóvenes de la escuela al trabajo y a la vida adulta. Un enfoque de emprendimiento amplio y que incluya distintos instrumentos acrecentará la productividad y la equidad.
Empoderar a los jóvenes es una inversión inteligente para un crecimiento inclusivo en estos tiempos de desafíos económicos y políticos. Las competencias y el emprendimiento pueden empoderar a los jóvenes para desarrollar actividades económicas intensivas en conocimiento que aseguren el éxito de su transición de la escuela al trabajo.